Rodaje en órbita

El 5 de octubre de 2021 el cosmonauta Anton Shkaplerov llevó en una nave Soyuz al director de cine ruso Klim Shipenko y a la actriz Yuliya Peresild a la Estacion Espacial Internacional con el objetivo de rodar escenas de una película in situ. La iniciativa surgía de la agencia espacial rusa, Roscosmos, junto con la televisión pública Canal Uno y la productora Yellow, Black and White.

Así, después de que Rusia lanzara el primer satélite al espacio, el primer perro, el primer hombre y la primera mujer, Rusia fue también el primer país en rodar en el espacio exterior una cinta larga de ficción, desbancando los planes de la NASA, que aspiraba a filmar en colaboración con Space X, la compañía del multimillonario Elon Musk, una película protagonizada por Tom Cruise.

Los inusuales visitantes de la EEI estuvieron en órbita un total de 12 días para rodar lo que en la película final durará unos 30 minutos. El film, que llevará por título вызов (“Desafío”),  trata de una cirujana que viaja a la EEI para operar de urgencia a un astronauta. Al parecer, se ha querido dar tal realismo a la escena, que en lugar de recurrir a efectos especiales, se ha preferido trasladar el set de rodaje al espacio. Tanto la actriz como el director han tenido que pasar por un entrenamiento especial antes de poder ser cosmonautas, y además de sus respectivos trabajos, han tenido que hacer muchos más en la estación. Junto con los astronautas que ya se encontraban allí, entre todos hicieron de cámaras, técnicos de luces, responsables de vestuario, maquillaje etc…

Uno de los desafíos a los que han tenido que hacer frente ha sido el de la iluminación, ya que en la estación en órbita el sol sale y se pone cada 40 minutos. Además estaba la complicación del manejo de la cámara. Mientras el director Shipenko grababa mirando por el visor, los cosmonautas verdaderos agarraban y manejaban al mismo Shipenko por la estación para que no saliera volando ni se chocara con objetos o paredes.

No dudo de que esta inusual visita y las nuevas tareas que realizaron los actuales habitantes de la EEI les trajera algo de alegría al romper la monotonía que suelen tener allí arriba. Pero… ¿en realidad era esto necesario? ¿Es necesario irse al espacio a rodar una escena? La realidad cinematográfica es diferente a la realidad vivencial. Por ejemplo, sabemos que en el espacio no hay sonido, pero cuando en una película vemos una explosión en el espacio y oímos explosiones no pensamos “que falso, en realidad no se debería de oír nada”, sino que nos lo creemos como parte de la ficción. De hecho, nos resulta extraño que haya explosiones sin sonido.

Por otra parte, me alegro de que la escena a rodar ocurriese dentro de la estación espacial. No quiero imaginar que pasaría si la película fuera por ejemplo Gravity… donde los protagonistas pasan mucha parte de la película fuera de EEI y con peligro de perderse en el espacio…

Y puestos a imaginar… si algún día contactáramos con seres extraterrestres inteligentes… les pediríamos que hicieran de extras en nuestras películas para darles más “realismo”. ¿Te imaginas?

Señora Alien, salga otra vez del estómago de Kane que le ha quedado un poco sobreactuado.